La producción, la otra bandera que izó Belgrano

19-06-2018 Manuel Belgrano es conocido por todos por su protagonismo en la política y por haber creado la bandera argentina. Pero su relación con el campo y el comercio fue parte importante de su tarea pública y las ideas que pregonaba.

Veinticinco años antes de la Revolución de Mayo un grupo de comerciantes de Buenos Aires reclamó la creación de un Consulado que pueda solucionar sus problemas. Tras nueve años de pedidos, en 1794 el Rey creó el Consulado de Buenos Aires.

El organismo contaba con la presencia de Manuel Belgrano como Secretario, quien se desempeñó como el promotor de las nuevas ideas económicas de la época. Por aquel entonces, el creador de la bandera fomentaba desde la función pública a la agricultura, y hablaba de "animar a la industria y proteger el comercio de un país agricultor".

Belgrano expresaba que "la agricultura es el verdadero destino del hombre", y según su mirada, el cultivo de la tierra significaba progreso y civilización. Su concepción se basaba en los ideales de los fisiócratas, que pensaban a la agricultura como la base de las riquezas del país.

Además de su interés por defender y promover la educación, el campo fue uno de los temas que más ocupaba al joven de poco más de 20 años. Para él, el conocimiento significaba eficiencia, creatividad, desarrollo del potencial humano y libertad; y la agricultura era sinónimo de apego a la tierra, derechos de propiedad y progreso económico.

Desde su cargo en el Consulado, el prócer nacional advertía que "es tal la dependencia mutua que tienen el comercio y la agricultura, que uno sin el otro no pueden florecer".

"Sin ese comercio, este país será miserable y desgraciado", anunciaba. Sin dudas, el creador de la bandera celeste y blanca mantuvo en alto también los reclamos de los trabajadores del campo y fue protagonista de un momento clave para el comercio.