CLIMA

Clima: se va El Niño y ¿viene una Niña débil?

Pablo Mércuri, especialista en clima del Inta, dijo en la Agrojornada que lo más probable es que venga un año “neutro” a partir de la primavera. Hasta mayo habrá lluvias por encima de lo normal.

31 de Marzo de 2016

El director del Centro de Investigación de Recursos Naturales del Inta, Pablo Mércuri, pronosticó que tras la disipación del fenómeno climático conocido como El Niño en el inicio del invierno, desde la primavera "lo más probable es que tengamos un año neutro o Niña débil".

Esto implica que, tras el período de excesivas lluvias que afectó a todo el país y fundamentalmente al sudeste cordobés en la primavera-verano, seguirá un ciclo marcado por lluvias normales o levemente por debajo de los promedios históricos.

Mércuri fue uno de los oradores invitados a la Agrojornada desarrollada en el Dinosaurio Mall bajo la organización del Grupo Agrovoz (La Voz del Interior + Agroverdad)

Cronología

Según Mércuri, el último trimestre del año pasado y el primero del actual estuvo marcado, en la provincia de Córdoba, por valores de precipitaciones que superaron con creces los promedios históricos.

En ese marco, dijo que la tendencia es que el nivel de lluvias permanezca por encima de lo normal en abril y mayo. Es decir, “un otoño con precipitaciones por encima de lo normal”, expresó.

Mércuri hizo una encuesta entre los presentes cuyo resultado fue que a la mayoría la preocupa fundamentalmente el mediano plazo en materia climática. Y les indicó qué se espera en ese lapso, que comprende básicamente la perspectiva para la próxima campaña.

La previsión de todos los modelos es que nos movamos en valores neutros o una Niña débil”, puntualizo. La Niña es el fenómeno contrapuesto a El Niño, en el sentido de que generalmente provoca períodos de gran sequía. Pero en este caso, no tendría un impacto alto.

“Las lluvias serían las normales para cada época, lo que no quiere decir que no puedan ocurrir eventos extremos puntuales”, aclaró Mércuri.

De todos modos, recordó que “en general, en las primaveras que siguen a años Niño fuertes, los diciembres no son muy llovedores”. Cabe recordar que ese mes es clave en la siembra gruesa argentina, por lo cual sugirió “conservar los excesos de agua de los suelos”.

Fuente: AgroVoz

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