La soja terminó la semana en baja

Con un fuerte descenso terminaron la semana los precios de la soja en el mercado local. Tendencia que estuvo relacionada con el retroceso de las cotizaciones en la Bolsa de Chicago y con el inminente inicio de la cosecha argentina, que lleva a los compradores a recortar sus propuestas por la mercadería con entrega inmediata. Así, la soja con descarga cercana en Rosario cayó un 13,16%, al pasar de 380 a 330 dólares por tonelada. La transición del precio de pizarra fijado por la Cámara Arbitral de Cereales de Rosario fue de 2971 a 2583 pesos.

Respecto de la soja de la nueva cosecha, las bajas fueron de 315 a 302 dólares por tonelada en la zona de Rosario; de 330 a 310 dólares en Bahía Blanca, y de 315 a 305 dólares en Necochea. La misma tónica negativa fue reflejada por las pizarras del Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), donde los contratos mayo y julio retrocedieron de 319 a 310,50 y de 320,50 a 312,20 dólares por tonelada.

En su informe semanal de comercialización agrícola, el Ministerio de Agricultura de la Nación (Minagri) relevó compras de la exportación (del 27 del 2 al 5 del 3) y de la industria(del 20 al 26 del 2) por 294.800 toneladas, que llevaron el acumulado de compras 2012/2013 a 43.615.200 toneladas. Con las estimaciones oficiales como referencia, de la cosecha pasada, que se inició con un stock inicial de 4,43 millones de toneladas; aportó 49,30 millones de producción, y cerraría con existencias de 3,13 millones, aún restarían vender 6.984.800 toneladas.

Las compras semanales de soja 2013/2014, en tanto, sumaron 520.400 toneladas y llevaron el total comprado por la exportación y por la industria a 6.078.300 toneladas, todavía un 31,51% por debajo de los 8.874.100 toneladas de igual momento del año pasado.

Acerca de los cultivos, el jueves la Bolsa de Cereales de Bueno Aires (BCBA) indicó que a pocas semanas del inicio de la cosecha, la condición de los cuadros en sectores del Núcleo Norte refleja el impacto de los excesos hídricos de febrero y la fuerte presión sanitaria que ejercieron isocas y enfermedades de fin de ciclo. “Pese a ello la expectativa de rinde medio se encuentra próxima a 35 quintales por hectárea y las primeras pruebas de cosecha arrojan resultados de 30 a 48 qq en lotes que aún presentan humedad por encima al estándar comercial. En cambio, en el Núcleo Sur las primeras pruebas entregaron productividades de 25 a 30 qq en cuadros afectados por diferentes condiciones climáticas,mientras que en Junín un lote puntual entregó en promedio 40 qq. En conjunto, ambas regiones concentran más del 30% de la superficie nacional. Si bien es cierto que las abundantes lluvias de las últimas semanas provocaron pérdidas de superficie y también complicaron el control de malezas, insectos y enfermedades, las perspectivas de cosecha aún se mantienen elevadas”.

Otra región que registra una fuerte presión de isocas y enfermedades es el sudeste de Buenos Aires. “En esta zona los cuadros de primera transitan etapas de llenado de grano, mientras que los de segunda finalizan floración o comienzan a fijar vainas. La expectativa de rinde regional al cierre de campaña aún se mantiene próxima a su promedio histórico. Las zonas más comprometidas a la fecha son La Pampa y el oeste y el sudoeste de Buenos Aires. Estas áreas no lograron revertir a tiempo la condición de sequía y ello se verá reflejado en los magros rendimientos que se esperan. Muy diferentes es el panorama en las restantes regiones periféricas a los núcleos productivos, donde las lluvias registradas desde mediados de enero y consolidadas en febrero, revirtieron por completo el déficit hídrico. De esta forma,gran parte de la región agrícola en Córdoba, el centro-norte de Santa Fe, el centro-este de Entre Ríos y los polos productivos NOA y NEA, reflejan cuadros en muy buenas condiciones, mientras transitan etapas de llenado del grano. Todas estas zonas mantienen perspectivas de alcanzar rendimientos por encima de los promedios históricos y ello permite sostener nuestra proyección de cosecha en 54.500.000 toneladas”.

Por su parte, el miércoles la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) proyectó la cosecha de soja 2013/2014 de la Argentina en 54,70 millones de toneladas, por debajo de los 55 millones previstos inicialmente. Este resultado sería el producto de un área sembrada de 20,30 millones de hectáreas, de las cuales no se levantarían 400.000 hectáreas, y de un rinde promedio de 27,5 quintales por hectárea. “Hay que destacar las importantes lluvias que desde la última semana de enero cayeron oportunamente sobre zonas clave. La soja protagonizó una recuperación notable tras los períodos de falta de agua y de olas de calor que desecaron rápidamente las reservas de agua en el suelo durante diciembre y enero.Sólo los cultivos de grupos cortos sembrados temprano fueron afectados por las condiciones de estrés termo hídrico durante las etapas evolutivas críticas”.

La entidad señaló que antes del arribo de las lluvias, el panorama era muy desalentador para la soja de segunda. “Los cuadros mostraban muy bajo crecimiento, imposibilidad de cerrar el entresurco y alta presencia de plagas como trips, arañuelas y bolillera, propias del panorama de sequía. Pero las lluvias cambiaron de carril el ciclo del cultivo, que pasó a desarrollarse de ahí en más sin limitantes hídricas de consideración”.

Vale destacar que el viernes, tras la publicación de los reportes respectivos de la BCBA y de la BCR, se registraron fuertes precipitaciones en amplias zonas agrícolas de relevancia para la nueva cosecha, con registros que superaron los 60/80 milímetros en sectores de Córdoba, Buenos Aires y Entre Ríos, donde los suelos ya están cerca de la saturación por las abundantes lluvias acumuladas en lo que va del año. Esto acentúa los riesgos para los cultivos y demanda un mayor monitoreo de las plantas, para actuar con premura ante síntomas de enfermedades de fin de ciclo que podrían poner en riesgo la cantidad y la calidad de la cosecha.

Tras 5 semanas consecutivas con precios en alza, la soja cerró en baja en la Bolsa de Chicago, donde las posiciones mayo y julio perdieron un 4,75 y un 3,72%, al pasar de 535,63 a 510,19 y de 523,51 a 504,04 dólares por tonelada. Entre los principales fundamentos bajistas del segmento se destacaron la preocupación por el rumbo de la economía china; algunas cancelaciones de compras hechas justamente por los compradores asiáticos, y –fundamentalmente– las ventas concretadas por los fondos de inversión especuladores, que retiraron parte de las ganancias acumuladas en las 5 semanas anteriores.

En cuanto al informe del USDA del lunes, el organismo mantuvo la cosecha en 89,51 millones de toneladas, en tanto que elevó de 820.000 a 950.000 toneladas sus importaciones y redujo la molienda de 46,27 a 45,99 millones y el uso total, de 48,96 a 48,69 millones. Como se esperaba, incrementó las exportaciones, de 41,10 a 41,64 millones de toneladas y recortó las existencias finales 2013/2014, de 4,09 a 3,95 millones, con lo que quedaron levemente por encima de los 3,84 millones esperados por el mercado.

Respecto de la oferta de Sudamérica, el USDA estimó la cosecha de soja de Brasil en 88,50 millones de toneladas, por debajo de los 90 millones del informe de febrero, pero por encima de los 88 millones calculados en promedio por los operadores. El miércoles, la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), dependiente del Ministerio de Agricultura de Brasil, redujo un 5,12% su estimación sobre la cosecha de soja brasileña 2013/2014, que pasó de 90,01 a 85,40 millones de toneladas.

La producción de la Argentina, en cambio, fue sostenida en 54 millones de toneladas, por encima de los 53,50 millones esperados por el mercado, pero por debajo de los 54,50 millones previstos por BCBA y de los 54,70 millones de la BCR. Y para Paraguay, el USDAestimó la cosecha de soja en 8,10 millones de toneladas, por debajo de los 9,30 millones del reporte de febrero.

El reporte semanal de las exportaciones estadounidenses marcó un bajo volumen de ventas de la campaña 2013/2014, pero bien podría decirse que acentuó la sobreventa de mercadería. En efecto, el USDA relevó exportaciones por 113.500 toneladas de soja de la vieja cosecha, por debajo de las 772.700 toneladas del segmento anterior y del rango previsto por el mercado, de 125.000 a 400.000 toneladas. Así, el total de ventas del ciclo comercial actual sumó 44,28 millones de toneladas, por encima de los 41,64 millones previstos por el USDA en su último informe mensual. Frente a este escenario, que llevaría al agotamiento inexorable de las existencias, con casi 8 meses por delante en el ciclo comercial 2013/2014, se abren dos opciones:

• Cancelaciones chinas por entre 2,5 y 3 millones de toneladas o
• La importación de, por lo menos, 2,5 millones de toneladas de soja sudamericana.Como se señaló anteriormente, en su informe del lunes el USDA elevó de 820.000 a 950.000 toneladas las importaciones estadounidenses.

Además, en su informe semanal, el USDA relevó el jueves ventas externas por 776.900 toneladas de soja 2014/2015, por encima de las 256.700 toneladas del segmento anterior y del rango previsto por el mercado, de 175.000 a 350.000 toneladas.