A menos de una semana del 30 de junio, el campo entrerriano vive con creciente inquietud la posibilidad de que venza el esquema transitorio de reducción de retenciones a las exportaciones agrícolas. Juan Diego Etchevehere, Director de la Sociedad Rural, Distrito Entre Ríos, advirtió que esta medida tendría un fuerte impacto económico sobre los productores de la Región Centro, que incluye a Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, y reclamó al gobierno nacional que cumpla con su promesa de eliminar las retenciones.

"La verdad que estamos muy preocupados, hicimos un trabajo para dimensionar el impacto y estamos hablando de una transferencia de USD971 millones al Estado nacional", expresó, Etchevehere, en el programa radial Chacra Agro Continental.

Para graficar la magnitud de esa cifra, la entidad comparó ese monto con la producción regional: equivaldría, por ejemplo, a 1.800.000 terneros, cuando toda la provincia de Entre Ríos produce alrededor de 1.150.000. También estimaron que serían necesarias 1.700.000 hectáreas de soja para generar ese volumen de recursos, frente a las 1.250.000 que se siembran hoy en la provincia y, en términos de inversión, se trataría del equivalente a más de 10 mil tractores.

En ese sentido, el dirigente señaló que "el 58% del total de las exportaciones nacionales proviene de la Región Centro, y solo en cultivos agrícolas se aportan alrededor de USD3.800 millones, a eso se le sumaría este nuevo esfuerzo, si no se prorroga la medida".

Cabe destacar que, de concretarse el fin del beneficio transitorio, a partir del 1º de julio la soja pasaría de tributar del 26% al 36%, el maíz y el sorgo del 9,5% al 12%, y el girasol del 5,5% al 7%. Etchevehere remarcó que las entidades agropecuarias han pedido a las autoridades que se sostenga la reducción, al menos mientras persista el contexto actual.

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El dirigente entrerriano explicó que cuando se redujeron transitoriamente las retenciones, en enero, el contexto era de precios internacionales deprimidos y costos en dólares elevados. Esa situación, según dijo, no cambió. "Los productores entrerrianos no tenemos grandes rindes, nuestro rendimiento es medio, no como en Santa Fe, Córdoba o Buenos Aires" y sentenció: "Si no tenemos un año bueno en lo climático, podemos entrar en zona de quebranto; eso es lo que queremos evitar".

Consultado sobre la evolución de la campaña gruesa en Entre Ríos, Etchevehere sostuvo que fue un ciclo positivo, con rendimientos algo por encima del promedio. Sin embargo, insistió en que la presión tributaria es asfixiante. "Seguimos sosteniendo una presión récord, con discriminación respecto de otros sectores económicos", dijo y comparó: "Siempre miramos con sana envidia a Uruguay, Brasil o Paraguay, que no tienen retenciones y siguen creciendo, ese debería ser nuestro norte".

Por su parte, Manuel Ron llamó a liberar el potencial del maíz en el país. "Cuando salgan las retenciones, va a haber una explosión productiva", advirtió.

Durante su actual presidencia al frente de Maizall, la alianza internacional del maíz que integran Argentina, Brasil y Estados Unidos, Manuel Ron resaltó la relevancia estratégica de estos tres países, responsables del 70% del comercio mundial del cereal. En representación de Maizar, Ron valoró la oportunidad de compartir con "dos potencias agroalimentarias" como Brasil y Estados Unidos, y de observar cómo transforman su producción de maíz.

"Competimos en los mercados, pero también colaboramos para mantenerlos abiertos", aseguró Ron en Chacra Agro Continental, y subrayó el rol clave de la biotecnología en la producción actual: "Casi el 100% del maíz que sembramos es transgénico con algún tipo de evento. Ha reducido insumos y facilitado el manejo del cultivo". En ese sentido, remarcó que Maizall trabaja para evitar barreras arancelarias o ideológicas que cierren el acceso a los mercados, especialmente por cuestiones vinculadas a organismos genéticamente modificados.

Consultado por la coyuntura argentina y los rumores sobre posibles cambios en las retenciones al maíz, Ron fue claro: "Información no tengo, pero el día que saquen definitivamente la retención, va a haber un salto productivo muy importante".

Actualmente, Argentina exporta entre el 60 y 70% del maíz que produce, mientras que Estados Unidos y Brasil transforman internamente la mayor parte del grano en carne, leche o biocombustibles. "Eso es trabajo, empresas nuevas, valor agregado", sostuvo Ron y agregó que "para poder transformar, primero hay que producir mucho más".

Asimismo, la Sociedad Rural de san Justo, Santa Fe emitio un comunicado en donde manifiestan su "firme y categórico rechazo a cualquier intento de aumentar los Derechos de Exportación (retenciones)". En ese sentido, desde la entidad aseguran que "esta medida no solo es inoportuna, sino profundamente perjudicial para miles de productores que ya enfrentan una situación límite".

Precios internacionales en baja, insumos cada vez más caros, presión impositiva en todos los niveles y escaso acceso al crédito configuran una tormenta perfecta para el campo. En ese contexto, aplicar una suba en los derechos de exportación no solo reduciría la rentabilidad: "pone en jaque la continuidad misma de muchas explotaciones agropecuarias", señalan desde la entidad santafesina.

El impacto no se limita a los márgenes del productor. La caída en la inversión y en el nivel de actividad repercute de forma directa en los pueblos del interior, donde el agro es motor económico y social. "Lo que pierde el campo lo sienten los pueblos", advierten.

Mientras avanza la planificación de la campaña 2025/2026, las decisiones que se tomen en estas semanas resultan claves. Una mayor carga impositiva podría traducirse en una menor área sembrada, menos incorporación de tecnología y una caída en la generación de divisas.

Por eso, desde distintas entidades reiteran el pedido al Gobierno Nacional para que revise "de forma urgente" esta política. En lugar de volver a subir retenciones, proponen avanzar en su eliminación total como parte de un camino hacia el desarrollo, el empleo genuino y la recuperación económica.