La Bolsa de Comercio de Rosario proyecta 27,7 Mt de trigo, la mayor producción de la historia, impulsada por rindes excepcionales y un aumento del área sembrada. En Entre Ríos, la soja de primera cae fuerte pero la de segunda crece, mientras la siembra nacional avanza con ritmo sostenido.

La campaña agrícola 2025/26 continúa entregando señales inéditas. De acuerdo con la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), el trigo argentino fijaría un nuevo récord al alcanzar 27,7 millones de toneladas, tras un fuerte ajuste al alza de 3,2 Mt respecto de la estimación previa. Este salto productivo se explica por rindes excepcionales en las principales regiones trigueras y por una superficie sembrada mayor a la esperada inicialmente.

Trigo: una campaña histórica por área, rinde y producción

Entre noviembre y diciembre, la estimación pasó de 24,5 Mt a 27,7 Mt. Un número impensado al inicio de la campaña, cuando la proyección se ubicaba en torno a 20 Mt tras la sequía que golpeó a los cultivos de verano. Con lluvias oportunas desde la siembra y condiciones casi ideales durante el ciclo, los rindes sorprendieron incluso a los técnicos más optimistas.

La BCR confirmó, mediante análisis satelital, 220.000 hectáreas adicionales en la región núcleo y otras 50.000 ha en Entre Ríos (según el SIBER). Con estos ajustes, el área nacional sembrada trepa a 7,17 millones de hectáreas, superando el récord histórico del ciclo 2001/02.

En cuanto a los rindes, el avance de cosecha del 58 % ya permite observar resultados inéditos: Región núcleo casi 60 qq/ha, Entre Ríos 42 qq/ha y Córdoba cerca de 40 qq/ha. Así, el rinde medio nacional se ajustó de 37,7 a 41 qq/ha, superando ampliamente el récord previo de 36,2 qq/ha en 2010/11. Descontando 400.000 ha no cosechadas, la producción final implicaría un crecimiento del 37 % respecto del ciclo anterior.

Santa Fe encabeza el ranking de rendimientos con 47,3 qq/ha, seguida por Buenos Aires (43,2 qq/ha), Entre Ríos (42 qq/ha) y Córdoba (39,6 qq/ha), todas con marcas récord. Técnicos destacan que las lluvias de julio y agosto, sumadas a un alto uso de tecnología -desde semilla y fertilización hasta controles sanitarios-, potenciaron la expresión máxima del cultivo.

Soja: avanza la siembra nacional y Entre Ríos marca contrastes

En paralelo, la siembra de soja en todo el país mostró un fuerte avance en las últimas dos semanas, alcanzando un 64% del área prevista gracias a una mejora climática temporal. En zonas como Alberti, en el centro-este bonaerense, las altas temperaturas y el descenso del agua permitieron retomar labores, aunque con un retraso que podría costar alrededor de 1.000 kilos/ha en soja de primera.

A nivel nacional ya se implantaron 10,5 millones de hectáreas de las 16,4 M planteadas, con un horizonte productivo de 47 Mt.

El panorama en Entre Ríos muestra particularidades. Según el SIBER, la soja de primera experimentará una fuerte caída interanual del 38%: solo se implantarán 400.000 hectáreas, frente a las 646.200 del ciclo previo. Aun así, el avance de siembra es del 96%, uno de los valores más altos de los últimos años.

En contraste, la soja de segunda crecerá un 17% respecto del ciclo anterior, alcanzando 750.000 hectáreas. Con un avance del 58 % en la implantación -435.000 ha ya sembradas-, el sur provincial lidera con un 73 %, mientras que el resto oscila entre el 46 y el 54 %.

Maíz: excelente condición y expectativas firmes

El maíz temprano transita el período crítico en condiciones muy buenas a excelentes gracias al aporte hídrico de noviembre. Aunque la presencia de una "Niña débil" genera cierta cautela, por ahora no afectó la posibilidad de siembras tardías. Sin embargo, en algunas zonas productores evalúan pasar superficie de maíz tardío a soja por cuestiones de precios y costos.

Con un avance del 57 %, ya se sembraron 5,4 millones de hectáreas de las 9,7 M planificadas. Para el circuito comercial se consideran 8 M ha, y la producción proyectada se mantiene en 61 Mt, un valor récord para el país.

Con récords históricos en trigo y buen desarrollo en soja y maíz, la campaña 2025/26 se encamina a ser una de las más sobresalientes de la última década, de la mano de condiciones climáticas favorables, incorporación tecnológica y una rápida respuesta del sector productivo.