Trabajadores en lucha

UATRE se planta ante la reforma laboral y se suma a la movilización de la CGT

UATRE se suma a la movilización convocada por la CGT para el 18 de diciembre y apunta contra un proyecto que, advierte, "precariza" y debilita la negociación colectiva

15 de Diciembre de 2025

La Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) confirmó el día de hoy su adhesión a la movilización convocada por la CGT para el 18 de diciembre, en rechazo al proyecto de reforma laboral impulsado por el Gobierno Nacional. 

En un documento difundido por el sindicato, el foco se posa sobre un punto que el sector conoce de primera mano: cualquier discusión sobre "el futuro del trabajo" no puede ignorar la realidad de quienes sostienen la producción del país, especialmente en el eslabón rural. 

El secretario general de UATRE, José Voytenco, explicitó la postura en términos políticos y gremiales: "Como sociedad tenemos la responsabilidad de levantar la voz cuando se ponen en riesgo derechos fundamentales", afirmó, y remarcó que el sindicato estará "defendiendo a las trabajadoras y los trabajadores rurales". 

De acuerdo con el comunicado de la entidad, el núcleo del cuestionamiento es que la reforma laboral "implica un retroceso en derechos básicos y habilita mayor precarización, debilitando la negociación colectiva, facilitando la discrecionalidad patronal y reduciendo garantías históricas del movimiento obrero". 

En esa línea, la UATRE sostiene que, tal como está planteada, la iniciativa busca "atomizar las negociaciones", volver más débiles las paritarias y "facilitar los despidos", afectando la capacidad de los trabajadores para defender sus condiciones de empleo. Y agrega: "Defender derechos es también defender la calidad del empleo y la competitividad del país". 

El gremio también detalló puntos críticos específicos para el trabajo rural: la reducción de la responsabilidad solidaria en esquemas de contratistas, la incorporación de un período de prueba (inexistente en el sector) que llegaría hasta ocho meses, y la pérdida de atribuciones de la Comisión Nacional de Trabajo Agrario para fijar salarios mínimos. 

De acuerdo a UATRE, una reforma "seria" debería partir del hecho de que el 70% de los trabajadores rurales continúa en la informalidad. En este sentido, la entidad sostiene que "mejorar el empleo exige combatir este problema, garantizar trabajo registrado y erradicar prácticas aún presentes en diversas regiones del país, como la explotación laboral e incluso casos de trabajo infantil". 

En su posicionamiento, UATRE intenta correr el debate de la consigna "modernización sí o no". Y sostiene: "La modernización real se logra fortaleciendo un sistema laboral más justo, formal, moderno y sostenible para todas las partes". 

Como representante de los trabajadores del agro, la entidad entiende que si la reforma avanza sin contemplar la particularidad del trabajo rural, el riesgo no es solo laboral, sino también productivo. Ya que detrás de cada hectárea trabajada hay medidas que pueden empujar a más informalidad o a una mayor protección de los trabajadores.