Innovación productiva

La tecnología que vuelve rentable a la sustentabilidad

Una nueva marca alemana llegó al país con una propuesta tecnológica que reduce los costos por hectárea y mejora la estabilidad de los sistemas productivos.

23 de Diciembre de 2025

En un escenario marcado por la necesidad de aumentar la productividad sin profundizar el impacto ambiental, la eficiencia energética, el manejo del suelo y la optimización de recursos se ven asociadas directamente a la rentabilidad agropecuaria. Así lo afirman desde Fendt, compañía de alta tecnología perteneciente al grupo AGCO, que consolidó su desembarco en la Argentina con un mensaje contundente: "la sostenibilidad no es una tendencia, sino una condición indispensable para la rentabilidad y el futuro del productor".

Según el presidente del Consejo de Administración de la marca, la sostenibilidad se apoya en tres pilares inseparables: ecológico, económico y social. En ese sentido, explicó: "una máquina eficiente consume menos, compacta menos el suelo y produce más; eso es sostenibilidad aplicada al negocio".

¿Cuáles son sus propuestas?

En el marco del 4.º Foro Global de Sostenibilidad de Fendt, se destacaron soluciones orientadas al cuidado del suelo y la reducción de costos operativos, factores de gran relevancia en regiones de alta intensidad productiva como la Argentina. En esa línea, señalaron que el control de la presión de inflado de neumáticos puede reducir la compactación, mejorar la tracción y preservar la estructura del suelo, con efectos acumulativos sobre los rendimientos de los cultivos posteriores.

En materia de alternativas energéticas aplicadas a la maquinaria, mencionaron el uso de combustibles renovables compatibles con motores diésel como estrategia para reducir emisiones sin modificar los esquemas de abastecimiento. Asimismo, presentaron desarrollos de electrificación con una tendencia de largo plazo en el diseño de equipos.

En nuestro país, donde la mecanización es un componente estructural del modelo productivo, la posibilidad de acceder a nuevas soluciones tecnológicas amplía el margen de decisión de productores y contratistas frente a un contexto cada vez más exigente en términos económicos y ambientales.

"El debate sobre el rol de la tecnología trasciende la incorporación de nuevos equipos y se vincula con una discusión más amplia: cómo sostener la productividad en el tiempo, preservando los recursos y mejorando la eficiencia de los sistemas agrícolas", concluyen desde la empresa.