La campaña 2024/25 quedará en la historia del girasol argentino. Con rindes récord y una recuperación del área sembrada, el presidente de ASAGIR, Martín Salas Oyarzún, habló con Chacra 360 y trazó un panorama optimista para el cultivo, aunque no ocultó su decepción por la decisión del Gobierno de mantener las retenciones a las exportaciones del complejo oleaginoso.

"La baja en la producción de Ucrania y Rusia generó una mejora en los precios internacionales que se trasladó a la industria, y de ahí a los productores", explicó Salas Oyarzún. Este incentivo de precios permitió una expansión del área sembrada, especialmente en provincias que venían relegadas en el cultivo: "En Santa Fe, Córdoba, el norte de Buenos Aires y Entre Ríos se volvió a sembrar girasol, y eso se sumó a un trabajo de larga data en genética y manejo", resaltó.

Aunque el Chaco -tradicional bastión girasolero- tuvo un invierno difícil, la producción nacional alcanzó entre 4,8 y 5 millones de toneladas, según las distintas estimaciones disponibles. "Es un récord desde que se tiene medición del rendimiento promedio nacional", celebró. Esto, aseguró, tendrá un impacto directo en las exportaciones del complejo: "Vamos a aumentar el aporte de divisas para el país. Históricamente se consumía un tercio y se exportaban dos tercios. Este año, posiblemente se exporten tres cuartos", adelantó.

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Las retenciones, un tema sensible

Respecto al panorama político y económico, Salas Oyarzún no esquivó el tema sensible del momento: las retenciones a las exportaciones, cuya continuidad fue recientemente confirmada. "No puedo dejar de decir que nos desilusiona. Teníamos la expectativa de que fuera el inicio de un camino. Entendemos la situación macroeconómica, pero creemos que sin retenciones el aporte del sector sería mucho mayor", sostuvo.

El titular de ASAGIR remarcó que el reclamo sigue vigente, aunque reconoció avances en otros sectores: "Estamos contentos de que a la industria no vinculada al agro le hayan bajado las retenciones, pero también creemos que nosotros, con otro régimen de amortización acelerada de inversiones, podríamos dar un salto productivo importante".

Finalmente, hizo un llamado al diálogo con el Estado: "Intentamos llegar a un punto de acuerdo con el Poder Legislativo para avanzar en todo lo que podamos. Somos optimistas, pero también realistas: sin un marco que promueva el agregado de valor desde la base, el potencial del girasol no se aprovechará en su totalidad".