En su última estimación de cosecha, el INV pronosticó que la producción de uva para esta vendimia 2022 se ubicaría 13% por debajo de la cosecha anterior.
Heladas tardías, la gran sequía, olas de calor intensas y viñedos no bien trabajados fue el combo hacia la baja. Mendoza perdió más de 260 millones de kilos.