El fuerte viento y falta de humedad complicaron la tarea de los bomberos
Más de 400 bomberos voluntarios continuaron combatiendo distintos focos de incendios forestales activos en las serranías de Córdoba, ante un clima de fuertes vientos y sequía.
Más de 400 bomberos voluntarios continuaban ayer combatiendo distintos focos de incendios forestales activos en las serranías de Córdoba, ante un clima de fuertes vientos y sequía y adonde se trasladó el ministro de Ambiente, Juan Cabandié, en tanto, el gobernador Juan Schiaretti anunció la ampliación del fondo para situaciones de desastre.
Las altas temperaturas, que este jueves alcanzaron los 33 grados, son una complicación que se suma a la sequía que se registra en toda la provincia, donde no hay lluvias de consideración desde mediados de abril.
En la región centro norte de Punilla hubo un frente de fuego que avanza con mucha actividad en dirección a Characato y Pampa de Olaen, zona en la que, durante varios días, las llamas arrasaron grandes superficies en Villa Giardino, Los Quimbaletes, Huerta Grande y La Falda en donde debieron protegerse viviendas durante largas horas.
En la zona de Las Jarillas, el ministro de Seguridad provincial, Alfonso Mosquera, y el director de Defensa Civil, Diego Concha, recibieron a Cabandié y sobrevolaron la zona de Villa Carlos Paz y San Antonio de Arredondo, donde los fuegos arrasan vegetación y monte desde hace tres días, como también volaron sobre San Clemente.
Efectivos de bomberos también trabajan intensamente en un incendio generado en Villa Carlos Paz, a la altura del barrio Villa Independencia, en donde el fuego quema monte y pajonales en una quebrada de muy difícil acceso para todo el personal, en una zona que por la proximidad de las viviendas muchos vecinos se convocaron para colaborar con las tareas.
Sin embargo, a pesar de la buena voluntad y solidaridad de los lugareños, las autoridades solicitaron que no se acerquen a las zonas, ya que no están preparados para esa labor, y en muchos casos entorpecen el accionar de los vehículos de emergencias y de los propios bomberos.
En Las Jarillas y San Antonio de Arredondo se desplazan otros socorristas; en la estancia Santa Rosa y en San Clemente, procurando contener el incendio que se desarrolla en la zona, para que no cruce el río y avance hacia Potrero de Garay, ya en el Valle de Calamuchita.
El Gobierno local informó que en todos los frentes trabajan 400 bomberos voluntarios con el apoyo de 10 aviones hidrantes, dos helicópteros, aeronaves pertenecientes a la Provincia y a la Nación.
En tanto, Cabandié consideró que "la agenda ambiental tiene que ser una política pública que exprese mayor ahínco que el que tiene en el plano nacional. Es un reclamo que todos tenemos que empezar a tener en cuenta. Pero el sector productivo y la sociedad también tienen que dar cuenta de esta responsabilidad".
El secretario de Gestión de Riesgo Climático y Catástrofes de Córdoba, Claudio Vignetta, dijo a los medios locales que el foco más intenso y de mayor riesgo se había registrado ayer en la zona de Bosque Alegre donde se encuentra el Observatorio Astronómico Córdoba (OAC), que hoy está controlado y en guardia de cenizas.
Ese foco fue generado por la reactivación del incendio de Villa Carlos Paz y San Antonio de Arredondo, que luego pasó por las cercanías del Alta Gracia, en el valle de Paravachasca, y Vignetta manifestó que un centenar de bomberos debieron ser asistidos por distintas lesiones y quemaduras, y ya se están recuperando.or su parte, el
Por su parte, el gobernador Schiaretti dispuso este jueves que "el Fondo de Asistencia en Situaciones de Desastre ascienda a 1.000 millones de pesos", y anunció también la adquisición de 20 kits de almacenamiento de agua de 700 litros "que se trasladan en camionetas y permiten atacar más fácilmente el fuego en zonas aledañas a viviendas".