Agroperiodistas e INTA: otro árbol que tapa el bosque
El error de Bronzovich y la evidencia un problema mayor.
En estos últimos días, un hecho particular ganó espacio mediático en el sector agropecuario. Estamos hablando de las desafortunadas expresiones del actual Presidente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), Nicolás Bronzovich.
Si bien este escrito es una nota de opinión, hagamos un breve repaso de los hechos para poder contextualizarlos y luego analizarlos. O sea, primero la información y luego las lecturas pertinentes al caso.
Hechos
"Bronzo", como se lo conoce en el ambiente agropecuario, llegó bien temprano a la primera jornada del Simposio Fertilidad 2025. Escoltado por la vice del INTA, Beatriz "Pilu" Giraudo, fueron derechito para el auditorio ya que ambos formaban parte de la apertura del evento.
En ese momento fue entrevistado (muy livianamente) por quien escribe esta nota. En dicha conversación el titular del INTA comentó: "Estamos haciendo foco en aquellas actividades de mayor impacto". Sin espacio para más preguntas, la charla quedó ahí y la nota salió publicada.
Horas más tarde, luego de la apertura del evento, los periodistas Esteban Fuentes (Clarín) y Gustavo Gigena (Cadena 3) entrevistaron a Bronzovich en los pasillos del Simposio: "¿Qué está pasando en el INTA?", fue la primera y obligada pregunta que le hicieron.
Bronzovich respondió lo mismo que horas antes había hecho con Chacra: "Vamos a hacer foco en todas aquellas actividades que tengan impacto, a aportarle conocimiento científico a todos aquellos sectores que puedan aportar riqueza a la economía argentina".
Entonces, la repregunta de los colegas fue la más lógica y esperable: "¿Cuáles son esas actividades de mayor impacto?". Todo iba bien hasta que a Bronzo se le salió la cadena.
El desmadre
"¿Qué actividades específicas? Por favor, hablá con los técnicos, soy el Presidente. ¿Te tengo que hablar de un país de no se cuántos grados de latitud y decirte actividad por actividad? Ni el peor profesor mío de la Facultad me hizo una pregunta tan difícil. No me parece que esté bien que yo, presidente del INTA, tenga que estar diciéndoles a ustedes...", continuó Bronzovich, ya evidentemente cansado de responder.
Y cerró, antes de irse, molesto y caliente por las preguntas: "Pero pónganse a laburar hijos de puta, vayan a hablar con los técnicos del INTA por favor. Con todo cariño del mundo, ¿quieren que el Presidente del INTA les diga en qué actividades trabaja el INTA?".
Un árbol más que tapa el bosque
"Que el árbol no tape el bosque", es una frase popular que significa "no enfocar demasiado en los detalles, o partes pequeñas de una situación, ignorando el contexto general o la imagen completa".
El árbol, mi estimado lector, es la expresión de Bronzovich cuando tilda de "hijos de puta" a los dos periodistas. La realidad es que no fue en formato "insulto" sino más una expresión vulgar de la jerga popular. No hubo "mala intención" en esa combinación de tres palabras. Digamos que se "excedió" en la confianza y se olvidó de los micrófonos.
Sin dudas, la expresión es desafortunada y más aún teniendo en cuenta el cargo nacional que ocupa Bronzovich. Pero claramente lo sacaron de contexto, lo tomaron de forma literal y no hicieron justicia con los hechos.
Pero el problema, del cual poco se habló en el ambiente periodístico especializado en la agroindustria, es la otra parte de la frase, que es "pónganse a laburar".
Sin vos ni voz
Lo que Fuentes y Gigena estaban haciendo hablando con Bronzovich, en ese exacto momento, era ni más ni menos que laburar. Preguntar al titular del INTA por la reestructuración del Instituto, el rumbo del mismo y tratando de tener información fidedigna y de primera mano, para luego compartir con los lectores/oyentes de los respectivos medios en los que trabajan.
¿Hay alguien más atinado para responder sobre el rumbo del INTA que el propio Presidente del INTA? ¿Cuál se supone que es el trabajo de un periodista?
Este Gobierno a impuesto una metodología muy peligrosa a nivel social, que lamentablemente todas las líneas de la cadena de mando respetan como un mantra militar: NO HABLAR, NO INFORMAR, NO HACER CONFERENCIAS DE PRENSA.
El vacío que dejan los funcionarios públicos y la consecuente falta de información oficial con la que contamos los periodistas, es lamentable. Una cadena rota desde el primer eslabón que deja indefenso al ciudadano argentino.
El error de Bronzovich, es mandar a laburar a la gente que está laburando. Es no hacerse cargo del rol que ocupa y no brindar las explicaciones que le debe a los miles de trabajadores del INTA, que no pueden estar mano a mano con él.
Pero el error de Bronzovich, no es de Bronzovich, es del espacio político con el cual él llega a presidir el INTA. Ese error es confundir lo público con lo privado, porque el primero tiene la obligación de comunicar e informar y el segundo no.
Mientras sigamos viendo el árbol, no vamos a poder ver el bosque.