Durante las últimas horas, un sistema frontal frío avanzó sobre el noreste argentino, provocando lluvias y tormentas de importancia en amplios sectores de la región. Este evento marcó el cierre de una etapa de inestabilidad significativa y dio lugar a un cambio marcado en las condiciones atmosféricas sobre gran parte del territorio nacional. El especialista de Meteored, Leonardo De Benedictis, nos cuenta cómo estará el clima durante esta semana.

Con el pasaje del frente, se produjo una rotación del viento al sector sur, favoreciendo el ingreso de una masa de aire más fría y seca. Esta situación generó un descenso de las temperaturas y una notable estabilización de la atmósfera, condiciones que se mantendrán durante buena parte de la semana en curso.

De acuerdo con el análisis de los próximos días, no se esperan precipitaciones significativas a lo largo de la semana, especialmente en la franja central y norte del país. El escenario general estará dominado por condiciones más estables, con cielo parcialmente nublado y baja probabilidad de fenómenos relevantes, al menos hasta el tramo final del período.

Semana con estabilidad, aire seco y escasas precipitaciones

El inicio de la semana está marcado por el dominio de la masa de aire frío y seco que se instaló detrás del sistema frontal. Esta configuración favorece condiciones de estabilidad atmosférica, con bajos niveles de humedad y ausencia de mecanismos que permitan el desarrollo de precipitaciones importantes en la mayor parte del país.

En este contexto, las lluvias serán prácticamente nulas o muy escasas, especialmente en la región central y pampeana. Incluso en sectores donde puedan registrarse algunas nubes, no se esperan eventos significativos, consolidando una semana mayormente estable desde el punto de vista meteorológico.

Este patrón resulta coherente con los campos de anomalía de precipitaciones para los próximos siete días, que indican lluvias por debajo de los valores normales en la franja central del territorio nacional. La estabilidad será una de las características dominantes del período, al menos hasta que comience a modificarse la circulación atmosférica hacia el final de la semana.

Ascenso térmico y regreso de la inestabilidad hacia el fin de semana

A partir del martes y hasta el viernes inclusive, la circulación del viento comenzará a rotar progresivamente al sector norte. Este cambio permitirá el ingreso de aire más cálido y húmedo, provocando un aumento sostenido de las temperaturas y una paulatina recarga de humedad en la atmósfera.

Durante este lapso, especialmente entre miércoles y jueves, se prevén temperaturas elevadas en amplias regiones del país. No obstante, este ascenso térmico será de corta duración y no alcanzará para modificar el balance semanal, que seguirá mostrando valores térmicos promedio por debajo de los niveles normales.

Hacia el próximo fin de semana, un nuevo sistema frontal frío avanzará desde el sur hacia el norte del país. Este frente reactivará las condiciones de inestabilidad, generando lluvias, chaparrones y tormentas de variada intensidad sobre la zona Pampeana, el Litoral y el noreste argentino, donde nuevamente se concentrarían los mayores acumulados.

Anomalías de lluvias y temperaturas: señales claras en los modelos

Los mapas de anomalía de precipitaciones elaborados por el modelo del Centro Europeo (ECMWF) muestran un patrón bien definido para los próximos siete días. Se destacan anomalías positivas de lluvia sobre el norte del país, especialmente en el noreste argentino, en coincidencia con el avance del sistema frontal del fin de semana.

En contraste, la franja central del territorio nacional presenta anomalías negativas, reflejando acumulados de precipitación por debajo de los valores normales. Esto se debe a que el sistema frontal activará las lluvias principalmente desde el centro hacia el norte, dejando al sur y oeste de la región Pampeana con escasa actividad.

En cuanto a las temperaturas, el análisis semanal muestra un comportamiento cambiante. Si bien habrá días puntuales con marcas térmicas elevadas, el promedio semanal se verá influenciado por las temperaturas más bajas del inicio y del cierre del período, resultando en valores finales por debajo de los promedios climáticos habituales.