Lluvias récord y baja de retenciones: ¿una nueva era para el maíz y el trigo?
Julio cerró como el mes más lluvioso en cuatro décadas en la región núcleo, y el campo se pregunta cómo capitalizar un escenario inédito de reservas hídricas, precios firmes y mayor previsibilidad. ¿Más área sembrada o más inversión tecnológica?
Julio de 2025 fue el más lluvioso en 40 años en la región núcleo, y agosto arranca con más precipitaciones. Los acumulados mensuales superaron ampliamente los promedios históricos, con localidades como Carlos Pellegrini alcanzando 104,4 mm, muy por encima de los 20 mm típicos del mes. Otras zonas como Noetinger, Montes de Oca y Monte Buey también registraron altos niveles, con valores entre 74 y 85 mm. "Hay que retroceder hasta julio de 1985 para encontrar registros similares", explicó el consultor de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) Alfredo Elorriaga.
En total, las 36 estaciones de la red GEA/BCR promediaron 52 mm en julio, un valor inédito para un mes invernal. Rosario, por su parte, acumuló 70,6 mm, cifra que no se observaba desde 1978 o incluso 1962.
El fenómeno se atribuye a una confrontación inusual entre masas de aire húmedo del norte y aire frío del sur, lo que produjo lluvias más propias de primavera que del invierno. Según Elorriaga, esta dinámica podría continuar en agosto, incrementando aún más los acumulados invernales.
Maíz: con reservas hídricas óptimas, se espera una siembra 17% mayor
Según el informe de la BCR, a menos de un mes del inicio de la campaña 2025/26, el maíz se perfila con las mejores condiciones hídricas en cinco años. Luego de varias pre-campañas marcadas por la sequía, el panorama cambió radicalmente: la combinación de un año climático "Neutral", lluvias récord y el anuncio oficial de reducción de retenciones revitalizó el ánimo del productor.
La intención de siembra se mantiene en un aumento interanual del 17%, aunque en algunas zonas como Carlos Pellegrini ya se habla de un posible salto del 20%. "Se reactivó el mercado de semillas y fertilizantes, hay entusiasmo. El productor siente que tiene más margen y libertad para decidir", afirman técnicos de la zona.
En otras regiones, sin embargo, el optimismo se matiza. En Pergamino, por ejemplo, predomina la cautela: "Todavía es temprano para definir cambios concretos", señalan. En el sur santafesino, los técnicos remarcan que la mejora de precios podría reflejarse más en mayores dosis de fertilización, sobre todo con nitrógeno y fósforo, que en un aumento de área.
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El precio de los fertilizantes, especialmente el fósforo, será clave en la definición del paquete tecnológico. La tendencia apunta a potenciar los rindes más que expandir superficie.
Trigo: una campaña que busca revancha
El trigo también empieza a mostrar signos de recuperación tras el duro golpe del ciclo 2022/23, cuando el rendimiento promedio fue de solo 15 qq/ha y se perdieron 400 mil hectáreas. Hoy, el 94% de los lotes muestra condiciones de excelentes a muy buenas, gracias a los suelos recargados y temperaturas moderadas.
Aunque hay algunos focos con emergencias desparejas en el noreste bonaerense, la disponibilidad de agua alentó a muchos productores a refertilizar. En zonas como Bigand, se aplican dosis de urea de hasta 300 kg/ha, niveles por encima de los históricos. En Junín, también se multiplican las aplicaciones, ya sea durante la siembra o en cobertura.
No obstante, el aumento de humedad trae consigo un riesgo sanitario: en el centro-sur santafesino, técnicos advierten sobre la posible aparición temprana de roya y otras enfermedades fúngicas, lo que podría requerir dobles aplicaciones de fungicidas, sobre todo en materiales más vulnerables.
Un nuevo escenario: ¿más hectáreas o más tecnología?
Las lluvias de julio cambiaron el tablero productivo: reservas hídricas excepcionales, precios en recuperación, retenciones en baja y un clima más previsible reconfiguran el panorama para el segundo semestre del año.
Frente a este combo, los productores se debaten entre ampliar la superficie sembrada o intensificar las tecnologías aplicadas. La mayoría de los sondeos coinciden en que, si bien la expansión será moderada, el verdadero salto estará en la mejora del manejo agronómico, apuntando a mayores rindes mediante más fertilización, mejor sanidad y genética adaptada.
En palabras de un técnico de la zona núcleo: "No estamos ante una campaña cualquiera. Este año el clima da revancha, y el productor no quiere dejarla pasar".