Nueva Variedad

El INTA presenta "Piru INTA", una nueva papa ideal para chips

La variedad puede conservarse hasta 120 días a bajas temperaturas sin perder calidad y reduce la formación de compuestos oscuros y acrilamida, mejorando la salud y la eficiencia industrial.

13 de Noviembre de 2025

El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) desarrolló una nueva variedad de papa denominada Piru INTA, que promete transformar la industria de los snacks. Obtenida mediante edición génica, esta innovación permite conservar los tubérculos a bajas temperaturas -alrededor de 4°C- por hasta 120 días sin perder calidad, lo que mejora la eficiencia productiva y la seguridad alimentaria.

El proyecto, impulsado por un equipo del INTA Balcarce (Buenos Aires), busca resolver uno de los principales desafíos del sector: el endulzamiento inducido por frío, un fenómeno que genera compuestos oscuros y amargor en las papas destinadas a fritura, además de la formación de acrilamida, un componente neurotóxico.

"La papa es un cultivo clonal, lo que restringe las mejoras genéticas convencionales. Por eso, la edición génica representa una oportunidad tecnológica para generar nuevas variedades con mejor calidad poscosecha", explicó Gabriela Massa, investigadora del INTA Balcarce.

Los ensayos demostraron que Piru INTA mejora la calidad industrial de los tubérculos destinados a fritura, al reducir la formación de compuestos oscuros y la generación de acrilamida. De esta manera, aporta beneficios tanto a la industria procesadora, como a los productores y consumidores.

"Este desarrollo tiene un gran impacto en la salud humana, ya que estas papas son nutricionalmente mejores por no contener acrilamida. Los beneficios alcanzan a todo el sistema productivo, a la industria de papas chips y a los consumidores", destacó Sergio Feingold, también investigador del INTA Balcarce.

El trabajo se realizó sobre la base de la variedad Atlantic, una de las más utilizadas en la industria de papas chips. La técnica empleada, CRISPR, permite realizar modificaciones precisas sobre genes específicos sin incorporar ADN foráneo, por lo cual Piru INTA no es una variedad transgénica. En este caso, los científicos lograron inactivar el gen de la invertasa vacuolar, reduciendo así la acumulación de azúcares reductores durante el almacenamiento en frío.

"Cuando abrimos un paquete de papas chips y vemos un color amarronado, eso se debe al endulzamiento por frío. En Piru INTA, ese problema se evita", explicó Massa.

La innovación se encuentra en proceso de inscripción en el Registro Nacional de Cultivares y podría marcar un punto de inflexión en la cadena agroindustrial, al garantizar la disponibilidad de materia prima durante todo el año y mejorar la calidad e inocuidad de uno de los alimentos más populares del mundo.