En la última rueda operativa de la semana y con 12.505 animales encerrados, la plaza se mantuvo firme en el Mercado de Liniers. La demanda actuó con mucho interés por la hacienda de feedlot y castigó los conjuntos regulares. Esto generó brechas entre mínimos y máximos corrientes de hasta $6 en algunas categorías.

La operatoria fue muy ágil desde temprano. Ya sea de forma particular o en subasta pública, la celeridad para la venta se notó en todas las casillas. Incluso algunas de las que habitualmente rematan, se apresuraron para sacar algunos lotes al oído. El miedo era que los compradores cubran sus necesidades y levanten el pie del acelerador. Pero esto no ocurrió; la abultada oferta fue apenas suficiente para una demanda necesitada. Contra la rueda del miércoles, el mercado presentó mejoras en terneros, vacas y novillos.

La semana que viene, con paro de transporte y dos días menos de operaciones, el trabajo quedará reducido a los días lunes y miércoles.