Que no se pierda
En Argentina se pierden 100 kg de trigo por hectárea cosechada. Cómo evaluar las pérdidas en un lote
Se estima que las pérdidas producidas en la cosecha de trigo son de 100 kg/ha cada año. Pero como es imposible modificar algo que no se conoce ciertamente, a continuación veremos la metodología de evaluación de pérdidas que recomienda el INTA PRECOP (Proyecto de Eficiencia de Cosecha, Poscosecha de Granos y Forrajes, y Valor Agregado en Origen).
En precosecha
Para evaluar las pérdidas en precosecha se recomienda colocar 4 aros de 56 cm de diámetro c/u (1 m2 sumando los cuatro) en una zona representativa del lote. Dentro de cada aro se deben juntar los granos sueltos y las espigas volcadas y/o quebradas que, a nuestro juicio, no serán recolectadas por la plataforma (Figura 1).
Figura 1: disposición de los aros en el terreno previo al paso de la cosechadora
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Para convertir esta muestra a kg/ha perdidos en precosecha, se cuentan los granos sueltos y los obtenidos de las espigas volcadas y/o quebradas, teniendo en cuenta que 330 granos medianos de trigo por metro cuadrado representan 100 kg/ha de pérdidas.
Las principales causas de pérdidas de precosecha en trigo son de índole climática (vientos, temporales), plagas (pájaros, etc.) y/o de manejo (genética, etc.).
Pérdidas de cosecha
En promedio las pérdidas provocadas por la cosechadora en trigo se distribuyen como se muestra en la figura 2:
Figura 2: composición promedio de las pérdidas de cosecha en trigo en Argentina
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Entonces una vez evaluadas las pérdidas de precosecha, debemos trabajar con las pérdidas provocadas por la cosechadora. Para ello debemos utilizar cuatro aros ciegos, también de 56 cm de diámetro, pero esta vez con fondo o bien forrados de algún material (lona, arpillera, tapas de tambores de 200 lt., etc.).
En los mismos sectores del lote donde evaluamos precosecha, esperamos al paso de la máquina para realizar la evaluación de la cosechadora. Colocados al costado del paso de la máquina, esperamos que pase el cabezal, luego el eje delantero y antes de que nos supere el eje trasero y el desparramador de residuo de la maquina, debemos colocar en el piso los cuatro aros ciegos como se observa en la figura 3.
Figura 3: lugares aconsejados de colocación de los aros ciegos
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Tres de los cuatro aros ciegos deben ser colocados entre la rueda y el separador lateral del cabezal, en el ancho de trabajo del cabezal (y antes del paso del desparramador de residuo). El cuarto aro se pone por debajo de la máquina, lo más al centro posible del cajón de zarandas (Figura 3). Esto es importante porque de esta manera estaremos muestreando un sector de la maquina donde siempre está el mayor porcentaje de pérdidas por cabezal y cola.
Luego del paso de la máquina, los aros ciegos habrán quedado cubiertos del residuo de cosecha. Por sobre los aros ciegos, y entre el residuo, cualquier grano de trigo y resto de espiga con grano estará dentro de las pérdidas por cola. Para convertir esta muestra a kg/ha perdidos, se cuentan los granos sueltos y los obtenidos de los restos de espigas, teniendo en cuenta que 330 granos de trigo por m2 o 10 gramos de trigo por m2, representan 100 kg/ha de pérdidas.
Si las pérdidas por cola son mayores a la tolerancia, entonces significa que la cosechadora está teniendo problemas en los sistemas de trilla, separación y limpieza o está trabajando por encima o por debajo de su capacidad de trabajo.
Debajo de cada aro ciego, encontraremos la pérdida provocada por el cabezal mezclado con la pérdida de precosecha si la hubiera habido. Para poder discriminar estos dos valores, recolectamos todo grano suelto y espiga con grano que haya quedado debajo de los aros ciegos y transformamos la muestra a kg/ha perdidos. Una vez obtenido el valor, le restamos el valor de pérdidas de precosecha para obtener el valor de pérdidas ocasionadas por el cabezal.
En la cosecha de trigo es importante prestar especial atención a la regulación del molinete. La presencia de espigas perdidas es síntoma de una mala regulación.
¿Cuánto tolerar?
La mejor herramienta que tenemos para medir las pérdidas es la metodología de evaluación descripta anteriormente, ya que tiene costo cero y es de fácil aprendizaje y aplicación por el personal. PRECOP sugiere un valor de tolerancias (Tabla 1), para combinar con la metodología de evaluación de pérdidas y tener un parámetro para saber cuándo es necesario hacer un reajuste en la máquina.
Tabla 1: valores de tolerancias máximas de pérdidas para la cosecha de trigo
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Si el análisis de las pérdidas arroja valores superiores a la tolerancia (Tabla 1), debemos hacer las regulaciones de la máquina tantas veces como sea necesario para corregirlas.
PRECOP sugiere que productores, contratistas y técnicos trabajen juntos durante la cosecha para disminuir así las pérdidas, en pos de una mayor rentabilidad. Además recomienda:
-Comenzar la cosecha con un 18% de humedad
-Controlar periódicamente el estado de la barra de corte
-Cortar el cultivo lo más alto que sea posible
-Regular la agresividad del órgano de trilla según las condiciones del cultivo
-No picar el rastrojo, distribuirlo uniformemente para generar una buena cama de siembra
-Preservar la cama con equipos de alta flotabilidad y evitar la circulación innecesaria de tractores y tolvas
Fuente:INTA PRECOP