06/07/18 El sobrepastoreo y la degradación de los suelos son algunas de las consecuencias que padecen los establecimientos ganaderos extensivos presentes en la Patagonia.

Para condicionar el desplazamiento y la localización de grandes grupos de animales, de acuerdo a las necesidades del establecimiento y sin instalar cercos fijos y costosos, los técnicos del INTA Valle Inferior de Río Negro proponen implementar alambrados virtuales.

"Mediante un estímulo sonoro emitido por un dispositivo electrónico que llevan en el cuello podemos lograr que los animales aprendan a modificar su dirección de desplazamiento", explicó el técnico del INTA Valle Inferior de Río Negro, Ricardo Zapata.

Siguiendo esta línea, Ricardo Zapata agregó: "De no ocurrir el comportamiento esperado, el animal recibe un leve estímulo eléctrico similar al que proporcionan los boyeros. Esto sirve para reforzar la conducta".

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Desde el INTA explicaron la utilización de drones para elaborar mapas de vegetación que delimiten los ambientes presentes en cada establecimiento ganadero. "Estos mapas se cargan en el collar que llevan los animales, por lo tanto, cada productor podría establecer los límites de los alambrados virtuales desde cualquier dispositivo móvil como tablets, celulares o computadoras"

El especialista aclaró que las investigaciones se orientan a un método de entrenamiento de los rumiantes, sumado al aprendizaje de algunos individuos de la especie que pueden influir en el comportamiento del resto.

En este sentido, Zapata sostuvo: "Los alambrados virtuales prometen ser una tecnología clave para lograr beneficios ecológicos y económicos en la producción de ganado. El manejo de animales mediante alambrados virtuales aún está en el futuro, pero no muy lejano".

Rotación, clave en pastizales naturales

El clima que caracteriza a la región juega un rol importante. Según el técnico del INTA, es evidente que los procesos de erosión y degradación ocurridos en la región del sur fueron producto del incorrecto manejo de la carga animal.

De todos modos, el INTA aclaró que la existencia de alambrados no soluciona el problema del sobrepastoreo, ya que los animales utilizan en forma persistente las mismas zonas dentro de los potreros. En este sentido, dos recursos juegan un rol fundamental en el uso que el ganado hace del pastizal: la presencia de agua y la cantidad de forraje.