El girasol en la mira

En un informe reciente de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), se observó que, entre enero y octubre, nuestro país alcanzó un récord en tonelaje exportado de harina de girasol, con un aumento del 28,6% respecto de la campaña anterior, y el registro más alto del siglo. "Es uno de los productos para los que Argentina disputa el podio dentro de los líderes exportadores a nivel mundial", afirmaron desde la entidad.

En cuanto a los valores exportados, la BCR indicó una suma total de US$ 220,2 M, un 17,7% más que el promedio de los últimos cinco años para este periodo. En materia de precios FOB, el informe señala que, tras el máximo alcanzado en la campaña 2020/21, las cotizaciones fueron descendiendo hasta ubicarse en torno a los US$ 170 por tonelada este año.

En ese contexto, la entidad explicó que el desempeño del valor exportado responde principalmente al fuerte incremento de los volúmenes, más que a una mejora en los precios.

¿Qué pasó con la harina de soja?

La Bolsa informó que, entre abril y octubre, se exportaron 18,3 millones de toneladas de harina de soja, lo que representa una caída del 10,3% respecto de igual período del año pasado. No obstante, el volumen embarcado se ubicó un 10,5% por encima del promedio de los últimos cinco años.

En cuanto a los valores exportados, el informe indicó una baja del 23% interanual, mientras que el precio FOB promedio se ubicó en US$ 296 por tonelada, siendo el nivel más bajo desde la campaña 2006/07.

¿Por qué cayeron los precios de exportación?

La BCR señaló como un factor determinante de esta caída el avance de varios países en la promoción de políticas de biocombustibles más estrictas. Según explicó la entidad, este fenómeno es común en naciones con grandes excedentes de producción de soja, como Brasil y Estados Unidos, que destinan esos volúmenes a la industria.

Ante el aumento de los requisitos normativos para el biodiesel, se generó una mayor demanda de oleaginosas para su procesamiento y la obtención de aceite. Sin embargo, según explicó la entidad, como efecto colateral del crushing o procesamiento de los granos se obtiene principalmente harina, lo que derivó en un fuerte incremento de la oferta global del producto. Esta mayor presión de oferta empujó a la baja los precios FOB.

Como consecuencia de este proceso, en el informe se destacó que las exportaciones mundiales de harina de soja registraron un fuerte salto en la última campaña. Según las cifras, en 2024/25 los envíos globales crecieron más de un 12% interanual, muy por encima del promedio de los últimos años, lo que reforzó la presión sobre los precios internacionales.

Finalmente, otro aspecto señalado por la Bolsa es la relación negativa entre el precio del aceite y el de la harina de soja en la Argentina. "Los cambios en la producción de uno necesariamente afectan a las disponibilidades del otro", explicaron. En un año en el que se alcanzó el segundo mayor volumen de exportación de aceite, se registraron los precios relativos de exportación harina/aceite más bajos de la serie histórica.