El 2013 presentó en el Mercado de Liniers un volumen de hacienda superior al 2012, a lo largo de todo el año se comercializaron 1.463.036 cabezas, un 13,62% por encima de igual período del año 2012. Si se realiza un seguimiento mes a mes 2012-2013 se observan picos de hasta un 29% en meses como abril. Durante gran parte del año el mercado fue fiel referente del comportamiento de la faena del país, siendo el reflejo de una oferta abundante entendida primero, por una recuperación del rodeo iniciada años atrás en paralelo con la recuperación de precios de la hacienda en pie, segundo por una menor retención de vientres, y tercero por el bajo nivel de exportaciones que si bien no implica mayor faena, significa más destinos al mercado interno.

La composición de la hacienda destaca una buena participación de terneros/as y vacas en proporciones similares. Como viene sucediendo en los últimos años la oferta de novillos es muy reducida. En el 2013 la participación de los novillos en el Mercado de Liniers fue del 11%, ocho años atrás en el mismo lugar la participación era del 20%. La regulación del mercado exportador y la imprevisibilidad a largo plazo afectaron la actividad de la industria exportadora y con ella la producción de novillos.

Los precios promedios generales tuvieron dos picos significativos a lo largo del año. El primero en los meses de Enero-Febrero, de carácter estacional, con subas del 10 y 9% respectivamente con respecto al año 2012 y el segundo, más definido, marca el repunte iniciado en octubre que estableció un nuevo nivel de precios. Refiriendo a este último, se dieron varios factores que coayudaron al alza de los precios en pie: el precio de la hacienda estaba estancado hacia unos tres años, las lluvias que acompañaron la primavera redujeron la oferta de hacienda en el mercado,y el precio del cuero tuvo un incremento en torno al 40% lo que le dió a la industria una mayor espalda para poder pagar más por la hacienda del mercado.

Por otra parte es de destacar el fuerte incremento de precios que se dió en las vacas buenas demandadas por la industria exportadora para cumplir con clientes externos, Rusia principalmente. De junio a noviembre su cotización se incrementó en un 39%, alcanzando en determinados momentos precios máximos cercanos a los 13 pesos.