Uruguay superó los estándares históricos de calidad de aplicación
Se midió por primera vez el nivel técnico y la calidad de aplicación aérea en todo el país. Superó ampliamente los estándares históricos.
En una jornada sin precedentes, se midió por primera vez el nivel técnico y la calidad de aplicación aérea en todo el país. Superó ampliamente los estándares históricos.
Uruguay acaba de lograr lo que hasta ahora parecía inalcanzable: auditar, en un mismo evento, a la totalidad de su sector de aviación agrícola, evaluando tanto el nivel de conocimiento de los pilotos como la calidad de las aplicaciones aéreas. El resultado fue tan sorpresivo como alentador: más del 80% de conocimiento técnico promedio, cuando la media histórica regional se encuentra en torno al 53%.
El evento se llevó a cabo el martes 10 de junio en el Instituto de Adiestramiento Aeronáutico y fue organizado por ANEPA, APAU, DINACIA, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y Syngenta. La coordinación técnica estuvo a cargo del Programa de Productividad y Calidad en Pulverización, una iniciativa conjunta entre Grupo APC y la Federación Argentina de Cámaras Agroaéreas (FeArCA), que viene desarrollando auditorías y capacitaciones en toda la región.
"Lo que vimos en Uruguay no tiene antecedentes. Por primera vez auditamos un país entero y los resultados fueron extraordinarios, tanto en el compromiso como en la preparación técnica de sus pilotos", destacó Juan Molina, coordinador del programa y referente técnico de FeArCA.
Durante la jornada se realizaron capacitaciones teóricas, presentación de protocolos, evaluación de conocimientos y una simulación de aplicación aérea con un avión AT-504. A través del uso de tarjetas hidrosensibles se midió la calidad de aplicación, alcanzando un impactante 96% de eficiencia.
Además de los datos técnicos, el evento fue un ejemplo de articulación público-privada: participaron todas las empresas de aeroaplicación del país, y se trabajó en conjunto con autoridades aeronáuticas y agronómicas, incluyendo representantes de DINACIA y del MGAP.
La actividad forma parte de una serie de acciones que apuntan a elevar los estándares de la aviación agrícola en Sudamérica, promoviendo pulverizaciones más eficientes, seguras y responsables, tanto desde el punto de vista ambiental como productivo.
"El caso de Uruguay marca un antes y un después. Demuestra que cuando hay voluntad, método y compromiso, se puede volar mejor, producir mejor y cuidar más", concluyó Molina.
Con estos resultados, Uruguay se posiciona como uno de los países más avanzados en calidad de aplicación aérea en el continente.