Vuelven las rotaciones

Aunque algunos pensaron durante mucho tiempo que la relación entre los productores argentinos y la soja era un amor eterno, casi fanatizado, el nuevo escenario está despertando en muchos agricultores otras pasiones, particularmente por el maíz y quizás en menor medida por el trigo, dos cultivos que en la última década habían ido perdiendo encanto –en términos de área de siembra- progresivamente.

Así, el cambio que se experimenta en distintos aspectos del país, en los lotes significa que volverán las rotaciones con gramíneas, una práctica que fue mermando mientras la soja se convertía en el último reaseguro de rentabilidad, como también refugio por sus menores riesgos agronómicos y comerciales.

Sostienen este pronóstico cinco productores líderes, que trabajan en distintas zonas, de las tres provincias principales de la Zona Núcleo, y son referentes de las organizaciones técnicas Aacrea y Aapresid. Santiago del Solar Dorrego, José Luis Tedesco, Fernando Zubillaga, Eddie Nolan y Gustavo Martini coinciden que tras la rebaja de las retenciones a la oleaginosa estrella -desde el 35 al 30%- y la eliminación de ese tributo a los demás cultivos, el maíz, el trigo, el girasol, y otros cultivos de invierno como cebada, colza y legumbres –quizás en ese orden- tendrán un cuadro relativo mucho más favorable.

Datos preliminares de una encuesta entre 1.500 productores CREA avalan la perspectiva de los productores entrevistados por Chacra. En números concretos, por ejemplo, el relevamiento indica que el porcentaje de lotes que incluirán cultivos de invierno en las rotaciones pasará del 21% al 27%. Parece poco, pero los responsables de la entidad técnica advierten que debe leerse en perspectiva: “Si tomamos en cuenta que el porcentaje clásico es del 33%, el salto representaría recuperar la mitad de lo retrocedido, de una campaña a otra”, ponderan.

Particularmente Nolan, productor en la zona de Venado Tuerto, Santa Fe, cree que “se volverá a las proporciones históricas, con mucho aumento de superficie de maíz y algo menos de trigo y girasol”.

El productor cordobés, Gustavo Martini, coordinador técnico de la comisión de Agricultura en Aacrea, refleja que “los márgenes proyectados entusiasman para recuperar área de gramíneas, principalmente maíz. Todavía es difícil arriesgar un porcentaje de aumento de área maicera, pero seguramente subirá. Si bien la eliminación de derechos de exportación es muy favorable, aún quedan factores por analizar, como el precio de la semilla y las eventuales caídas de precio por la superficie de siembra que se está estimando en USA”.

Santiago del Solar Dorrego, productor en la zona de Rojas, una de las localidades que conforma el histórico triángulo dorado de tierra fértil pampeana junto con Pergamino y Salto, no arriesga porcentajes específicos pero dice que “seguro va a haber más maíz. Las limitantes del maíz, son por un lado financieras por la diferencia de costo de implantación entre una hectárea de maíz y una de soja. También veremos cuál es la demanda y posibilidad de abastecer de semilla de los híbridos que demanden los productores”.

A José Luis Tedesco, director adjunto del programa de Agricultura Certificada en Aapresid y ex presidente de la Regional Chacabuco de la misma entidad, le preocupa que “la inercia de tantos años de sojización puede complicar las oportunidades que brinda hoy el maíz para todos. En mi zona, el área agrícola está cubierta en un 90% con soja (explotaciones chicas que no se planifican articulados con la comercialización) y tengo dudas sobre la financiación que requiere pasarse a maíz, que requiere inversiones altas.

Con todo, Tedesco ya tiene proyectado con su socio que incrementarán el área de gramíneas, al menos hasta el 50% de los lotes (el último año lo hicieron sólo en el 15%) con doble cultivo, trigo-maíz, trigo-soja y quizás en algunos casos algo de colza, incluso con maíz. El resto será soja de primera, que de todos modos se combinará con cultivos de cobertura “Hoy, por las malezas-enfatiza Tedesco- el suelo no queda más desnudo” (ver recuadro).

Martini combinará al trigo principalmente con soja de segunda. También espera que el área aumente, por la eliminación de retenciones y por los excesos hídricos que muchas zonas del sur de Córdoba han experimentado en esta campaña”.

Del Solar también le tiene fe al girasol, aunque no debemos olvidar que el mercado de girasol es chico, y va ser noticia también en el mercado mundial. Los productores tenemos que poner eso en la balanza a la hora de sembrar más girasol, ya que los números son muy atractivos.

Fernando Zubillaga, productor tambero en el Lincoln, noroeste bonaerense y presidente del Congreso CREA 2016, remarca que de acuerdo a lo que conversa con agricultores de todo el país, las expectativas para el aumento de gramíneas son altas pero se definirán según los costos de implantación al momento de comprar los insumos y el dinero con que se cuente como capital de trabajo o ayuda financiera.

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