Crece la exportación de garbanzos desde Córdoba

 Las ventas de productores y firmas locales moverían U$S 60 millones en pocos meses. Los precios están en alza y la provincia es una jugadora de peso en la producción nacional. Mientras miles de argentinos vacacionan, hay negocios que viven su pico más alto en los meses de verano. Muchas de esas actividades son más que conocidas, como la hotelería, la gastronomía y los servicios que se mueven al ritmo del turismo. Pero hay otras que pasan casi inadvertidas para la mayoría.

 Mientras más grande es el garbanzo, mejor cotiza en el mercado. Entre ellas está la exportación de garbanzos, que para Argentina vive sus jornadas más arduas de venta entre diciembre y marzo. Según la Bolsa de Cereales local, el año pasado se sembraron alrededor de 38.500 hectáreas en la provincia, que aportaron un volumen de 80.600 mil toneladas. "Los rindes no fueron malos, pero quedaron por debajo del año anterior, cuando la productividad fue mejor. Igual, es un cosechón", evaluó Andrés Brown, de Cono Agropecuaria, uno de los principales jugadores locales. 

Se calcula que Córdoba genera, por lo menos, la mitad del volumen de garbanzos que produce el país, aunque esa participación podría ser mayor. En el último año, la demanda y la cotización se fueron para arriba, por lo que el garbanzo movería en esta campaña ventas por alrededor de 60 millones de dólares desde la provincia.

 "Hay precios excelentes. Hace cuatro o cinco años que no tenemos estos valores. Fracasó la cosecha de Canadá, con mala calidad por cuestiones climáticas. También fue pobre lo de México y eso provocó más demanda", comentó Gustavo Siciliano, de Dassa, otro de los protagonistas en el mercado cordobés. 

Esa firma está concentrando buena parte de su proceso industrial en una flamante planta que levantó en Sinsacate, 60 kilómetros al norte de la Capital. En esas instalaciones, ubicadas en la zona núcleo para el garbanzo cordobés, trabajan unas 20 horas diarias para la limpieza y separación por calibre de los garbanzos. "La demanda está firme, pero para embarques en enero, con precios entre 30 por ciento y 40 por ciento por encima de la campaña pasada", indicó Sebastián de la Torre, de Barbalé Agropecuaria, que este año planea construir su propia planta.

 A nivel mundial, el termómetro lo marca India, tanto en producción como en consumo. Según Brown, la anterior cosecha en ese país no fue buena. "Cuando India falla, buscan legumbres por todos lados. Argentina quedó prácticamente sola ahora", señaló. Los precios no son uniformes, ya que el mercado paga según el tamaño del garbanzo. Las dos grandes variedades son Kabuli y Desi. En la jerga, la primera es una legumbre de tenedor y la segunda, de cuchara. 

Si los calibres están entre siete milímetros y nueve milímetros, los precios oscilan entre 700 dólares y 900 dólares por tonelada (a modo de referencia, la tonelada de soja en Chicago cotiza a unos 370 dólares). Esos valores tenderían a bajar cuando en marzo ingresen las nuevas cosechas de India y México.